Neko Tsukahara se despierta en un vasto y desolado desierto, donde el crepúsculo se extiende hasta el horizonte. No recuerda quién es ni cómo terminó allí. De repente, el «Hotel Tasogare» aparece detrás de ella. Al entrar, es recibida por un gerente con la cabeza en llamas. Sin saber si está viva o muerta, Neko comienza a buscar una manera de recuperar sus recuerdos, cuando llega un invitado misterioso.